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El origen del Castillo de Balmoral: Último hogar de la reina Isabel II

El castillo de Balmoral se encuentra situado en el concejo escocés de Aberdeenshire, en las tierras altas del este de Escocia, dentro del parque Nacional de Cairngorms. Es una de las residencias privadas de las reinas y reyes desde la época de la reina Victoria y su marido, el príncipe consorte Alberto de Sajonia-Coburgo-Gotha. La actual finca en la que se encuentra situado el castillo cuenta con 20.000 hectáreas de terreno. La reina Victoria y el príncipe Alberto realizaron visitas a Escocia en los años 1842 y 1844, hospedándose en diversos castillos escoceses. Pero en el año 1848, debido al clima húmedo y por recomendación del médico escocés de la monarca, Sir James Clark, el príncipe Alberto arrendó el castillo en el vecindario de Balmoral. Balmoral siempre fue conocido por tener uno de los aires más puros y saludables de toda Escocia, además del clima más seco y menos lluvioso de las tierras altas del oeste del país (Pope Humphrey, 1893: 9-15). Este pequeño castillo les ofrecía una vida privada alejada del ojo público, y su paraje recordaba a Suiza y Turingia, tierra natal del príncipe Alberto, con grandes bosques de pino caledonio (Miers, 2012: 48-56).

Figura 1: Valle de Dee con el Castillo de Balmoral. Fuente.

En el año 1852, el príncipe Alberto compraría finalmente la finca de Balmoral con sus 4,451 hectáreas. Más tarde, en el año 1853 se comenzó a construir el actual castillo principalmente por la falta de espacio del anterior y se remodelaron los jardines. También se compró Birkhall, una finca vecina a Balmoral reservada para el príncipe de gales, en la que se construiría la residencia privada del príncipe heredero. El nuevo castillo inspiró su construcción en la antigua arquitectura señorial escocesa o Scottish Baronial. Este estilo arquitectónico posee dos características definitorias: la primera son torretas redondas llamadas torretas de pimienta o pepper-pot turrets, proveniente de los chateaux franceses del siglo XVI. Esta influencia arquitectónica es heredada por la cercanía de los reyes de Escocia con Francia, antes de su unión con Inglaterra; y la segunda característica es una gran torre, inspirada en las casas con torres defensivas medievales. En el caso del castillo de Balmoral, esta torre es de treinta metros de altura con un reloj y una asta de bandera con el estandarte real que indica cuando la monarca se encuentra en el castillo. No obstante, otros de los rasgos definitorios de este estilo arquitectónico es el porte-cochère o puerta de entrada de carruajes, las ventanas abohardilladas o los frontones escalonados, consiguiendo con esta arquitectura que el castillo consiguiera el aspecto de un castillo sacado de un cuento (R. Jones, 2005: 6-8). En el año 1855, tras dos años de reformas supervisadas por el príncipe Alberto, el castillo estaba preparado para ocuparse parcialmente. La reina Victoria amaba Balmoral por encima de cualquiera de sus otras residencias, dejando constancia de ello en su libro Leaves from the Journal of our Life in the Highlands from 1848 to 1861 publicado en el año 1864, donde aparecen extractos de su diario describiendo sus vacaciones en Escocia con su esposo.

Cada año mi corazón se vuelve más fijo en este querido Paraíso, y tanto más ahora, que todo se ha vuelto la propia creación de mi querido Albert, su propio trabajo, su propio edificio, diseño propio, como en Osborne; y su gran gusto, y la huella de su querida mano, han sido estampadas en todas partes.

Victoria, 2010: 111

Con la muerte del príncipe Alberto, en el año 1861, la propiedad pasó a manos de la reina Victoria, deseo de su esposo que plasmó en su testamento. Pocos cambios han sido llevados a cabo en el castillo desde entonces, y de ser necesarios no deben interferir en la arquitectura y estilo del castillo.

Figura 2: Vista lateral de antiguo Castillo de Balmoral.
Fuente: (Victoria, 2010: 64)
Figura 3: Entrada principal de actual Castillo de Balmoral. Fuente.

Esta residencia fue pensada para hospedarse durante seis semanas al año, o en otoño, como pabellón de caza. Sin embargo, tras la muerte del príncipe Alberto, la reina Victoria pasaría aquí largas temporadas, puesto que le recordaba a su amado esposo. El tartán de Balmoral fue diseñado por la reina Victoria y su esposo, el príncipe Alberto, en el año 1853 para decorar elementos de varias habitaciones. A día de hoy, el tartán se encuentra en cada habitación, en cortinas, alfombras y papel de paredes, entre otros sitios (Clark, 2011: 105-115). 

Figuras 4 & 5: Tartán de Balmoral (derecha, Fuente); (izquierda) última foto tomada de la reina Isabel II antes de su fallecimiento, vistiendo el tartán de Balmoral (izquierda, Fuente).

La finca Balmoral fue un lugar donde la reina Victoria y la reina Isabel II fueron muy felices. El estilo de vida eduardiano vivido en Balmoral durante las vacaciones radicaba en que los hombres salieran de caza por los páramos a primera hora de la mañana, mientras que las mujeres se les unirían en el almuerzo. Para la reina Isabel II los dos meses del año que pasaba en Balmoral eran los más felices. Podría pasarse horas andando por las colinas otoñales de la finca, recordando los sueños de su niñez añorando la vida de un terrateniente rural que podría haber tenido si no hubiera sido reina. Disfrutando de las vacaciones veraniegas con sus nietos y en su momento un lugar de refugio para los hijos del ahora rey Carlos III y Diana, princesa de Gales, cuando ésta falleció, el 31 de agosto año 1997, en un trágico accidente de tráfico en Francia. Balmoral también se convirtió en una prueba de fuego para los primeros ministros, quienes debían pasar un largo fin de semana otoñal en la finca de Balmoral con la reina Isabel II.

Al final de sus días la reina Victoria no fallecería en su amado Balmoral, sino durante su estancia navideña en castillo de Osborne, situado en la isla de Wight en el año 1901. Mientras que Isabel II sí fallecería en este castillo escocés en septiembre del año 2022 (Lacey, 2003: 287-350).

Bibliografía

Humphrey, F. P. (1893). The Queen at Balmoral. London: T. Fisher Unwin Paternoster Square.

Miers, M. (2012). A Highland Paradise. Country Life, March 7, 46-56. Recuperado de: https://keyassets.timeincuk.net/inspirewp/live/wp-content/uploads/sites/8/2014/08/country-life-balmoral-march-7-2012.pdf

Clark, R. W. (2011).  Balmoral: Queen Victoria’s Highland Home. London: Bloomsbury reader.

Lacey, R. (2003). Monarch: The Life and Reign of Elizabeth II. New York: Free Press / Simon & Schuster.

Jones, N. R. (2005). Architecture of England, Scotland, and Wales. London: Greewood Press.

Reina Victoria. (2010). Leaves from the Journal of our Life in the Highlands from 1848 to 1861. Cambridge: Cambridge University Press.

1 comentario en “El origen del Castillo de Balmoral: Último hogar de la reina Isabel II”

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