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Los Misterios De Agatha Christie. ¿Realidad O Ficción? Veneno, Desapariciones, Crímenes… Una Fina Línea Que Separa La Realidad De La Ficción A Lo Largo De Su Vida

Agatha Christie se considera una de las autoras más prolíficas de la historia. Todo el mundo conoce sus novelas. Sin embargo, tras su faceta de escritora se esconden misterios y anécdotas que hacen que su vida sea tan intrigante como las de los protagonistas de sus novelas. Vivió intensamente: ejerció de dispensadora farmacéutica durante las dos guerras mundiales, se casó en varias ocasiones, viajó por todo el mundo. En su libro Muerte en el Nilo, refleja la pasión que sentía por la Cultura egipcia, la cual conoció en uno de sus múltiples viajes por el mundo. 

Estas vivencias, unidas a su creatividad e imaginación en la narrativa, dieron como resultado una trayectoria prolífica con más de setenta novelas. Christie dijo una vez: «los mejores crímenes para mis novelas se me han ocurrido fregando platos. Fregar platos convierte a cualquiera en un maníaco homicida de categoría». Sufría disgrafía, una enfermedad que afecta a la condición muscular, lo que hacía que sus relatos manuscritos fueran ilegibles. Cuando la enfermedad avanzó,  contrató a un ayudante para que siguiera escribiendo sus novelas.

Hoja manuscrita de Agatha Christie donde se de claramente la disgrafía que padecía (Fuente)

Hoja manuscrita de Agatha Christie donde se de claramente la disgrafía que padecía

Christie, que ejerció de enfermera durante la Primera Guerra Mundial y convirtió en compañeros de vida a sus personajes de ficción después de cumplir los 30 años, escribió más de 50 novelas y relatos y realizó adaptaciones teatrales de sus novelas: una de ellas, La ratonera, es la obra teatral de mayor permanencia mundial en escena. Ha vendido más de 2.000 millones de ejemplares de sus obras y en 1971 recibió la distinción de Dama del Imperio británico.

LA MISTERIOSA DESAPARICIÓN DE LA REINA DEL CRIMEN, ¿UNA MERA CASUALIDAD?

El misterio comenzó un 4 de diciembre de 1926, cuando en el condado de Surrey, en su Gran Bretaña natal, se halló su coche con un fuerte impacto frontal. En el interior del coche estaba el abrigo de la escritora, su permiso de conducir, una maleta… pero ¿qué había pasado con Ágata Christie? ¿dónde estaba? ¿secuestrada? ¿asesinada como en una de sus novelas quizás? Ese día sería el primero de once largas jornadas sin saber nada de ella. Un misterio en la vida de la reina de los misterios. 

Ejemplar del periódico Daily Mirrow donde narran la desaparición de novelista (National Geographic)

Parecía que la tierra se la había tragado: policías, personas voluntarias, bomberos, perros rastreadores e incluso una medium participó en la búsqueda. Durante esos días, todo tipo de hipótesis se tuvieron en cuenta: podía haber sido víctima de un crimen a manos de su marido o de una persona buscando la fama al ser el asesino de la reina del misterio. Incluso se barajó la idea de que pudiera ser una estrategia de la escritora para lanzar a la fama su última novela. 

Sin embargo todo se resolvió el 15 de diciembre, cuando la hallaron en la ciudad balneario de Harrogate, en el condado de Yorkshire, hospedada bajo el nombre de Teresa Neele. Nunca se supo la verdadera razón de su desaparición, pero la hipótesis más plausible fue que la escritora se refugió allí para sobrellevar una mala situación personal. Su marido le pidió el divorcio porque quería casarse con una mujer más joven: Nact Neele (la escritora sabía de su existencia y se hospedó en el balneario utilizando su apellido). Esta noticia junto al fallecimiento de su madre, sumió en una gran depresión a la escritora, que tuvo un intento de suicidio. Tras todo esto, ingresó en una clínica para poder recuperarse de todo lo sucedido. A pesar de este episodio, Agatha Christie resumió su vida como feliz. En su infancia tenía una casa con jardín y unos padres que «se amaban tiernamente», según dijo ella misma. 

Recuperada ya de todo lo sucedido, contrajo nuevamente matrimonio con el arqueólogo Max Mallowan, a quien conoció en un viaje por Oriente Próximo y con él pasó temporadas en Siria e Irak debido a sus investigaciones y trabajos. Una frase célebre de la escritora es: «cásate con un arqueólogo, cuanto más vieja te hagas, más encantadora te encontrará». 

ÁGATHA CHRISTIE Y EL USO DEL VENENO ¿REALIDAD O FICCIÓN?

Su talento innato a la hora de escribir, le dio el título de pionera forense. Incluso antes de que el término se usara con rigor científico, la criminalística tuvo gran protagonismo en sus novelas. Fue la primera persona en utilizar el término «escena del crimen» en el año 1923, en su libro Asesinato en el campo de golf. Análisis de impresiones dactilares, huellas de calzado o incluso el uso de un kit forense, eran sólo algunos aspectos que se podían leer en sus novelas y que por aquel entonces no se aplicaban en la ciencia forense. El kit forense de las novelas de Ágatha Christie comenzó a usarse en el año 1916, mientras que el primer kit en la vida real, surgió alrededor del año 1924, cuando Sir Bernard Spilsbury fue testigo de cómo un equipo policial recogía muestras de la escena de un crimen sin ningún tipo de rigor ni criterio. 

Kit forense utilizado alrededor de 1940 (Museo de Londres)

Pero lo que más destacó es el protagonismo que le dio al veneno como arma homicida en sus novelas. Pero, ¿cómo podían ser tan precisas las cantidades de veneno usadas en sus asesinatos? La precisión con la que describía el uso de esas sustancias se dio gracias a sus conocimientos de química tras trabajar como enfermera y dispensadora farmacéutica en los hospitales de Torquay y del University College de Londres. En la vida real, ella se encargaba de preparar las medicinas para curar a los enfermos de guerra: diferentes mezclas según las dolencias. Sustancias y cantidades que, dependiendo de su uso, podían curar o matar a una persona. 

El uso del veneno en las novelas de Ágatha Christie fue tan sonado y famoso que incluso fue objeto de estudio. Kathryn Harkup escribió un libro titulado A is for arsenic: the poisons of Ágatha Christie, donde la autora realiza un análisis de todas las novelas de la escritora donde utiliza el veneno como arma homicida. 

Hubo un gran revuelo por el tema del uso del veneno, su clara descripción y análisis; os preguntareis el porqué. Pues bien, en sus novelas, los venenos más usados fueron el arsénico y el talio. El primer caso conocido de envenenamiento por talio ocurrió sólo unos meses después de la publicación de la novela Pale Horse, en 1962. Graham Young, el homicida, dijo no haber leído la novela pero, ¿estaría mintiendo o solo fue una fatal casualidad? Nunca lo sabremos…

Pero no todo lo relacionado con la reina del crimen tiene porqué ser malo. Gracias a la precisión a la hora de describir la sintomatología de un envenenamiento, se salvó la vida de una niña. En el año 1977 ingresó en el Hospital de Londres una niña de 19 meses con aparentemente una enfermedad extraña. Su enfermera, Marsha Maitland era una lectora de las novelas de Christie y supo reconocer un posible envenenamiento por talio. Tras hacerle las pruebas oportunas a la niña, se descubrió que efectivamente, había sufrido un envenenamiento accidental por talio. 

Ágatha Christie vivió rodeada de misterio, tanto en sus novelas como en su vida real. Era una persona tan hermética como interesante. Sus novelas bien podría decirse que han sido escritas en este siglo. ¿Habrán inspirado algún otro crimen en la vida real? Quizás… pero eso forma parte del misterio que rodea la figura de Agatha Christie.

Bibliografía

Caamaño, E. (2020): Ágatha Christie: la biografía definitiva de la Reina del Crimen (Memoria y biografías). Editorial Almuzara.
Christie, A (1977): An Autobiography. Editorial Molino.
Harkup, K (2015): A is for Arsenic: The Poisons is Ágatha Christie. Bloomsbury Sigma.
Moreno, V. et alli (2000): Biografía de Ágatha Christie. www.buscabiografias.com

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