ArqueoTimes.es

La pequeña flecha verde. El simbolismo sexual maya del colibrí

Figura 1. Vaso policromado de Tikal, tumba 196. Archivo Kerr (K8008).

Las aves que pueblan la región conocida como el área maya fueron objeto de numerosas representaciones pictóricas a lo largo del desarrollo de esta cultura, ocupando un lugar importante dentro de ellas como divinidades (García Barrios, 2009: 93). La variabilidad de especies diferentes dotó al imaginario maya de un rico contenido pictórico con manifestaciones artísticas de todo tipo. Esto se debe principalmente al entorno en donde se desarrollaron, a esa riqueza y variedad de flora y fauna.

La cualidad sagrada que presentan las aves se debe a su capacidad de volar y desplazarse por la bóveda celeste (de La Garza, 1995: 7). Las aves en sí son animales errenales pero tienen la capacidad de volar por el cielo, en donde se encuentran principalmente las divinidades mesoamericanas (de La Garza, 1995: 7). Para los mayas, las aves más importantes son el quetzal, el azulejo real, la guacamaya roja, el águila, la urraca y el colibrí, principalmente (de La Garza, 1998: 129). Estas aves forman parte de varios aspectos de la vida de las sociedades mayas como la religión, los rituales y el juego de pelota, en donde la vestimenta empleada hace alusión a esos signos del mundo celestial (Barrrois y Tokovinine, 2005: 27).

Figura 2. Colibrí de la región de costa, Calypte costae, de la amilia de los Trochilidae.
Figura 3. Algunas especies de colibrí en Mesoamérica. Consultado en britannica.com.
Figura 4. Tamaño máximo y mínimo que puede tener un colibrí, entre 5 y 22cm. Tomado de West y Butler (2010:17).

En concreto, el colibrí es un ave relacionada con el carácter y la potencia sexual del Sol, simbolizando la sexualidad (de La Garza, 1998: 129; Caja, 2012: 10). Del mismo modo, este pequeño pájaro se suele asociar con la guerra y con la sangre, como ocurre en Chichén Itzá, en donde sus representaciones están asociadas con el sacrificio humano (de La Garza, 1998: 129; Caja, 2010: 10). Esto se debe a una de las principales características de esta ave, la forma en la que extraen el néctar de las flores introduciendo su alargado pico en ellas, comparándolo con el derramamiento de sangre (Caja. 2010: 10; Miller y Taube, 1993: 98). En algunas representaciones del posclásico reciente en Chichén Itzá se muestra al colibrí en un contexto de sacrificio humano atravesando con su pico el corazón de una persona que emerge de una flor (Miller y Taube, 1993: 98).

Figura 5. Algunas especies de colibríes.

El colibrí, conocido como tzunuun o dzunnuun por los mayas, y uitzitzilin en algunas regiones de México, es una de las aves más pequeñas y frágiles de mesoamérica, siendo también una de las aves más veloces y ágiles que existen (Caja 2010: 9; Seller 1996: 230; de La Garza, 1995: 58). Existen diferentes variedades y tipos de colibríes en toda la región mesoamericana, con colores y tamaños diversos. Por un lado, los que presentan un plumaje oscuro y con verdes metálicos que adornan espalda y cola, denominados quetzaluitzilin; y por otro lado, los tonos más cobrizos y rojos, con aspecto brillante que cubren varias partes del cuerpo (Seller, 1996: 230). A pesar de su pequeño tamaño son aves muy agresivas que les lleva a enfrentarse a otras especies de mayor tamaño, de ahí su relación con la guerra y la sangre (Miller y Taube, 1993: 98).

Figura 6. Vaso pintado de Tikal, fechado para el período Clásico Tardío, muestra un colibrí con alas de serpiente. Tomado de Taube (1987: 3).

Existe en la región mesoamericana, de forma general, un mito relacionado con el componente sexual de esta ave. El mito retrata la historia de un héroe que se transforma para intentar seducir a una mujer (Chinchilla Mazariegos, 2010: 58). Todas las variables del mito culminan en un mismo punto, la creación del Sol y la Luna (Chinchilla Mazariegos, 2010: 58).

En la actualidad, esta concepción se sigue manteniendo en algunos lugares de Mesoamérica. Según ciertos estudios de etno-ornitología se han mostrado varias formas rituales en las que son empleados animales sagrados, en este caso, el colibrí es usado en brebajes amorosos para fomentar el deseo en la mujer amada y atraerla.

Figura 7. Escena de un colibrí o mosquito chupando del pecho de una mujer. Tomado de Chinchilla (2010: 46).

Conclusiones

Los estudios relacionados con el significado de los animales en la iconografía maya son amplios, sin embargo, los relacionados exclusivamente con esta ave son escasos y breves, con referencias repetitivas. Por lo tanto, es complejo determinar la profundidad de su significado. En otras culturas como la azteca, el colibrí juega un papel más protagonista y la bibliografía relacionada con esta ave es mucho más amplia. El paisaje y entorno en donde se desarrollan estas culturas influye notablemente en el desarrollo de un imaginario concreto, plagado de los animales e insectos que habitan ese entorno. Al mismo tiempo, siguen existiendo sociedades mayas contemporáneas que ayudan a comprender el simbolismo de esta ave, teniendo en cuenta que los conceptos y creencias evolucionan con el tiempo pasando de ser un ave sexual, de sangre y guerra, a un animal empleado para curar dolencias, enfermedades y despertar el deseo sexual.

Bibliografía

Barrois, R. R. y Tokovinine, A. (2005). El inframundo y el mundo celestial en el juego de pelota maya. J. P. Laporte, B. Arroyo y H. Mejía (Eds.). XVIII Simposio de Investigaciones Arqueológicas en Guatemala, (2004), 27-38. Museo Nacional de Arqueología y Etnología, Guatemala.

Caja, A. (2010). Las aves de los mayas prehispánicos. Asociación FLAAR Mesoamérica.

Chinchilla Mazariegos, O. (2010). Of birds and insects: the hummingbird myth in ancient Mesoamérica”. Ancient Mesoamerica, 21, pp. 45-61.

De La Garza, M. (1995). Aves sagradas de los mayas. Facultad de Filosofía y Letras y Centro de Estudios Mayas del Instituto de Investigaciones Filológicas de la UNAM, México.

De La Garza, M. (1998). Rostros de lo sagrado en el mundo maya. Paidós, México.

García Barrios, A. (2009). Chaahk y el Pájaro O’ en el periodo Clásico y en narraciones coloniales. Estudios de Cultura Maya, 34 (1), 91-114.

Miller, M. y Taube, K. (1993). The Gods and Symbols of Ancient Mexico and the Maya. An Illustrated Dictionary of Mesoamerican Religion. Thames y Hudson, Londres.

Seller, E. (1996). The Animal Pictures of the Mexican and Maya Manuscript. Collected Works in Mesoamerican Linguistics and Archaeology, 5. Labyrunthos, California.

Taube, K. (1987). A Representetion of the Principal Bird Deity in the Paris Codex. Research Reports on ancient Maya Writing, 6. Center for Maya Research. www.mesoweb.com

West, G. C. y Butler, C. A. (2010). Do Hummingbirds Hum? Fascinating answers to questions about hummingbirds. Rutgers University Press, New Brunswick, New Jersey y Londres.

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *